Fue en 1981 durante el Encuentro Feminista que se realizó en Bogotá donde se declaró oficialmente el 25 de noviembre como el Día Internacional contra la Violencia hacia la mujer. Se eligió esta fecha ya que fue el día que 3 de las 4 hermanas Miraval fueron -en su propio país, República Dominicana-, secuestradas, torturadas y asesinadas por miembros del servicio secreto militar del entonces dictador Rafael Trujillo. La vida de Minerva, Patria y María Teresa Miraval fue durante la década de 1960 el emblema que la sociedad dominicana usó para tratar de rescatar a su pueblo de la dictadura que Trujillo ya tenía más de 30 años ejerciendo.
El día de hoy estamos aquí reunidas para invitarlas e invitarlos a las acciones que tendremos para rendir homenaje a estas 3 heroínas que perdieron la vida por la búsqueda de una sociedad más justa e igualitaria, sin embargo, traer a estos tres personajes y su historia nos exige mirar nuestro entorno, hablar y ser responsables de él, por ello, no podemos omitir los 397 feminicidios que han ocurrido del 01 de enero al 04 de noviembre de 2010 en nuestro Estado,[1] tampoco podemos omitir el aumento en las desapariciones de mujeres y las agresiones sexuales de las cuales se registra una diaria aproximadamente, aunado a estos datos, el estado mexicano tiene una deuda con la sociedad y sobre todo nosotras, con todas las mujeres, deuda que se arrastra con la sentencia de Campo Algodonero, misma sentencia que la Corte Interamericana puso al Estado mexicano por las desapariciones y homicidios de mujeres registrados desde el año de 1993, es importante señalar que será el próximo 10 de diciembre que nuestro Estado tendrá que responder con los acciones acordadas,[2] y nosotras que estamos aquí invitándolas e invitándolos a recordar a esas mujeres que lucharon por la justicia no esperamos menos que la respuesta favorable y justa a las familias de las víctimas de la sentencia de campo algodonero.
Nosotras como organizaciones en la búsqueda de una sociedad justa e igualitaria demandamos a las instancias gubernamentales hagan cumplir la LEY ESTATAL DEL DERECHO DE LAS MUJERES A UNA VIDA LIBRE DE VIOLENCIA que desde finales del 2007 se cuenta en nuestro Estado. Los objetivos de la ley son claros: prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en Chihuahua.[3] Entiéndase que la violencia contra la mujer constituye una violación a los derechos humanos y a las libertades individuales, siendo esto una ofensa a la dignidad humana y una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres, por ello reclamamos nuestra ley se difunda y sobre todo sea cumplida por las autoridades encargadas de la aplicación de justicia, no queremos más sentencias queremos justicia y que no se repitan sucesos atroces como lo son los ocurridos en el campo algodonero.
[1] Base de datos Justicia para Nuestra Hijas.
[2] Estandarización de protocolos utilizados para investigar delitos relacionados con desaparición, violencia y homicidio a mujeres. Una adecuación del Protocolo Alba, así como su cumplimiento; crear una página electrónica de actualización permanentemente que contenga la información personal necesaria de todas las mujeres, jóvenes y niñas desaparecidas en Chihuahua desde 1993, implementar programas y cursos permanentes de educación y capacitación en derechos humanos y género, para la debida diligencia en la conducción de averiguaciones previas y procesos judiciales relacionados con discriminación, violencia y homicidios de mujeres por razones de género, y superación de estereotipos sobre el rol social de las mujeres; un programa de educación destinado a la población en general del estado de Chihuahua.
[3] Véase Ley Estatal de las mujeres a una vida libre de violencia.
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